Piden juicio a tres policías por no custodiar a una víctima de femicidio que denunció 25 veces al asesino

El pedido de citación a juicio a tres policías que desobedecieron la orden judicial de custodiar la casa de una mujer que murió tras ser atacada por su exmarido, sacó nuevamente a la luz el femicidio de Julia Torres, la víctima fatal que había presentado 25 denuncias por violencia de género y ni siquiera así logró preservar su vida.

El Fiscal de Instrucción en lo Penal Económico de Primera Nominación, Matías Bornancini, solicitó la citación a juicio contra los efectivos policiales Ricardo Chávez, Ricardo Adrián, Ricardo León y Fernando Zurita. Según la acusación, el sargento León era el oficial de servicio en funciones que "omitió designar al personal policial que debía cumplir la consigna requerida", mientas que el comisario Chávez y el subcomisario Zurita "omitieron arbitrar los medios necesarios para que se hiciera efectiva la orden dispuesta por la Justicia".

El dramático ataque ocurrió el 8 de febrero de 2013 a las 5.30 de la madrugada, cuando Gonzalía, después de haber acosado a Julia Torres con insistentes llamados telefónicos, estrelló su auto Renault 9 contra el portón de la casa (foto) , entró con un cuchillo en la mano y apuñaló reiteradas veces a la víctima, que intentó huir hacia el baño para protegerse.

Con el arma blanca clavada en el estómago, Julia fue trasladada al Hospital de Urgencias y luego de varias operaciones salvó su vida y semanas después volvió a su casa. Sin embargo, complicaciones posteriores por las heridas sufridas motivaron su fallecimiento el 9 de julio del mismo año.

Durante esos meses que sobrevivió tras el ataque, su historia tomó trascendencia pública por la cantidad de denuncias -25 presentaciones policiales y judiciales- que había realizado contra Gonzalía y que fueron infructuosas para salvar su vida.

El femicida fue condenado el 5 diciembre 2014 por la Cámara Segunda del Crimen a prisión perpetua por homicidio calificado por el vínculo y por violencia de género. Actualmente cumple esa sentencia en el penal de Bouwer.