Córdoba

A 12 años del motín policial: Córdoba recuerda las 30 horas que la dejaron sin control

A 12 años del motín policial en Córdoba, la provincia vuelve a mirar aquellas horas de caos y vacío de poder. Saqueos, violencia y una crisis política aún marcan el recuerdo del acuartelamiento de diciembre de 2013.


 

Por digitalc0813 digitalc0813

A 12 años del motín policial: Córdoba recuerda las 30 horas que la dejaron sin control | Córdoba
Córdoba: A 12 años del motín policial: Córdoba recuerda las 30 horas que la dejaron sin control

A 12 años del motín policial en Córdoba, la provincia recuerda las 30 horas sin patrullaje que desataron saqueos, violencia y un vacío político entre el 3 y 4 de diciembre de 2013, cuando el acuartelamiento dejó a la ciudad sin control. Dos muertos, cientos de heridos y una crisis institucional todavía resuenan en la memoria colectiva. El aniversario reactiva debates sobre responsabilidades y decisiones que marcaron aquellos días.

Los reclamos salariales se habían intensificado durante noviembre de 2013, liderados por familiares de policías ante la imposibilidad de sindicalización. El 3 de diciembre, el Comando de Acción Preventiva dejó de patrullar y se plegó a la medida de fuerza. La mediación del abogado Miguel Ortiz Pellegrini incluyó una propuesta de aumento, pero la negociación fracasó.

La noche cayó sin acuerdo y Córdoba quedó expuesta al vacío de seguridad. Más de 30 horas sin policías dejaron a los vecinos desamparados y sin respuestas oficiales. La ausencia de fuerzas federales profundizó la crisis y tensó la relación entre Provincia y Nación.

Los saqueos avanzaron con brutalidad en distintos barrios de la capital. Vidrieras destrozadas, comercios arrasados y vecinos armados marcaron una escena de caos. Hubo golpizas, enfrentamientos y episodios de autodefensa en toda la ciudad.

Entre el 3 y 4 de diciembre, Córdoba vivió una de sus noches más dramáticas. Los saqueos se multiplicaron y la violencia se extendió por decenas de cuadras. La sensación de desprotección fue total.

Dos personas murieron durante los disturbios: un joven baleado y un jubilado. Ninguna de esas muertes fue esclarecida y ambas permanecen en la impunidad. Cientos de heridos completaron un saldo devastador.

De la Sota regresó de urgencia en la madrugada del 4 de diciembre. Tras nuevas negociaciones, se firmó un acuerdo con un aumento del 30% y la Policía volvió a las calles. Horas después, Alejandra Monteoliva, entonces ministra de Seguridad, quedó fuera del cargo.

El juicio posterior condenó a 52 policías con penas menores. Pero los saqueos, las responsabilidades políticas y las muertes quedaron sin una respuesta definitiva. La herida institucional sigue abierta.

Hoy, a 12 años del acuartelamiento, el episodio vuelve al centro del debate. Monteoliva, protagonista involuntaria de aquella crisis, asumirá este martes como ministra de Seguridad de la Nación. Su llegada al cargo coincide con un aniversario cargado de simbolismo.