Entró a robar a una casa, se olvidó el teléfono y lo detuvieron cuando quiso volver para recuperarlo

La policía detuvo en la víspera a un joven acusado de un raid delictivo en tres viviendas del Barrio Napostá, gracias a un insólito descuido del sospechoso.

Se trata de Adrián Miqueas Agustín Millaleo (18), a quien le adjudican hurtos reiterados en domicilios de las calles 11 de Abril 944, 950 y Fuerte Argentino 455.

Todo comenzó con una denuncia del dueño del primer inmueble afectado al hecho delictivo. El morador denunció que un grupo de desconocidos había ingresado al quincho de su propiedad con fines de robo.

Los intrusos, al notar que se habían despertado los ocupantes de la casa, huyeron dejando sobre una barra desayunadora la mercadería que tenían pensada sustraer de un freezer.

Sin embargo, también apareció un teléfono celular que quedó en poder de las fuerzas de seguridad para comenzar con las averiguaciones pertinentes.

Horas más tarde, los efectivos de la Comisaría Segunda acudieron al llamado del mismo damnificado por una nueva presencia sospechosa en las inmediaciones de la vivienda.

De esta manera, según la crónica policial, en 11 de Abril 950 los uniformados procedieron a la detención del joven al constatar que había regresado con intenciones de recuperar su dispositivo.

A su vez, una vecina de la víctima se dio cuenta que el arrestado llevaba en su poder dos remeras negras que faltaban del tender de su domicilio.

Como si no fuera poco, una mujer también denunció en el destacamento Palihue que la bicicleta en la cual se movilizaba Millaleo había sido sustraída del edificio en el que reside en la calle Fuerte Argentino al 400.

El sospechoso juvenil quedó alojado en la sede policial por “hurto reiterado”, a la espera de lo que resuelvan las UFIJ N°8 y 15.