A partir de este accidente, se lanzó un megaoperativo para averiguar lo ocurrido y se abrieron paso varias hipótesis: si fue un descuido de los conductores, fallas en las vías, problemas de funcionamiento de los trenes, mal estado de la infraestructura y/o la ausencia de cables, que habían sido robados hacía unos días atrás e impedían el correcto señalamiento del camino.
Choque de trenes: falta de señalización en el San Martín
La Junta de Seguridad en el Transporte (JST), luego de distintas averiguaciones, lanzó un informe preliminar que difundió a través de sus redes sociales, el cual señala: "Durante sus recorridos, ambos trenes circulaban por la vía ascendente con señales automáticas y semiautomáticas, de acuerdo con el reglamento del Sistema ElectroAutomático Luminoso (SEAL) de la línea San Martín (LSM). Sin embargo, en la sección comprendida entre Cabín Ocampo y la estación Palermo, se circulaba con Orden Especial de Vía con Precaución (OEP) bajo bloqueo absoluto, debido a que las señales del sistema SEAL no funcionaban".
Según especifican, ambas locomotoras se encontraban sobre la vía ascendente. Debido al impacto, el segundo bogie del coche U3722 del tren 3021 se desprendió y quedó debajo de la locomotora B951. La formación del tren 3353 quedó detenida sobre el puente ferroviario y el coche U3722 se detuvo donde finaliza dicha obra de arte. La locomotora 1000 se desprendió del coche U3722 y continuó unos metros antes de detenerse.
En cuanto a los daños, detallaron que hubo una pérdida total de los parámetros geométricos de la vía sobre el tablero del puente, rotura de los durmientes de hormigón, remoción y acumulación de balasto y fracturas en rieles. A su vez, se registraron deformaciones en algunos elementos verticales de la estructura de la obra de arte, así como impactos en la mampostería de su ingreso.
En cuanto al tren 3353, detallaron que hubo daños tanto en la parte vehículo como en la parte carrocería de la locomotora SDD-7, incluyendo deformaciones en la estructura de la cabina delantera en el sentido de marcha y la fractura del vástago de su acoplador. Además, se constataron daños en los extremos de algunos de sus coches, que incluían deformaciones en los sistemas antiacaballamiento y en el conexionado entre vehículos.