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Las confesiones del detective que siguió a Maradona en Sevilla: noches largas y mujeres infiltradas

"Esa casa era como El Corte Inglés. Contamos 18 o 20 italianos, argentinos entrando y saliendo”, continúa el español.
Por Telefe Córdoba

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Internacionales: Las confesiones del detective que siguió a Maradona en Sevilla: noches largas y mujeres infiltradas

Un 28 de septiembre de 1992 Maradona aterrizaba en Sevilla. Y con él una gran cantidad de rumores sobre su alocada vida. Conscientes de ello, desde el club español decidieron contratar un detective privado que se acabaría convirtiendo en la sombra del ‘Pelusa’.

“Se abría la puerta y salía levantando el polvo como los Miura. Maradona se ponía a 190 Km/h, como una cabra”, explica ‘Charlie’ -que así se llama el encargado de perseguir al argentino- en una entrevista con el programa español ‘Vox Pópuli’.

“Esa casa no tenía salida, era lo bueno que tenía. Era un chalet y solo tenía una salida. Entonces pusimos un coche ahí y nos íbamos turnando. Esa casa era como El Corte Inglés. Contamos 18 o 20 italianos, argentinos entrando y saliendo”, continúa.

“Yo llevo 30 años en la calle y sé qué gente era. Aquello era un desastre”, insiste Charlie, al mismo tiempo que asegura que “aquellos seguimientos sirvieron para demostrar que era una vida no propia de un deportista”.

“Era íntimo amigo de un asador argentino. Tenía como 15 italianos, su representante y diez o doce gilipollas detrás. Maradona era tonto porque era buena gente, pero es que tenía una cantidad de gorrones detrás que los veías chupando y decías: ‘Este tío es carajote’. Tú puedes ser el tío más golfo del mundo, pero te puedes quitar a siete”, argumenta el detective español.

Pero el momento más jocoso de la entrevista llega cuando Charlie cuenta las artimañas de su equipo para meterse por completo en las “juergas” del jugador. Lograron ‘infiltrar’ a unas amigas en el clan: “ Eran modelos y con eso les pusimos la trampa. Este era muy buena gente, pero era muy golfo. Eran las cinco de la mañana y a las diez tenía que estar en la ciudad deportiva entrenando y el Diez no iba a entrenar”, cuenta.