En el día del gato lo mordió uno callejero y terminó internado por una peligrosa bacteria

El pasado martes 8 de agosto se celebró el Día Internacional del Gato (y se suma a las ya establecidas del 20 de febrero y el 29 de octubre). En ese marco, se conoció el caso de un hombre que fue mordido por un felino callejero y tuvo que ser asistido por su riesgoso estado de salud.

El hombre tiene 48 años y, a las horas del suceso, se percató de las serias consecuencias en sus manos. Preocupado por la situación, se dirigió a un centro para ser atendido, pero el procedimiento que le hicieron no fue suficiente para mejorar por completo.

Si bien existen otras dos, la fecha en cuestión fue elegida por el "Foro Internacional para el Bienestar Animal" (IFAW), en conjunto con otros grupos a favor de los derechos de los animales. Se conmemora desde el 2002 y el objetivo es rendir tributo a todos los gatos.
El afectado que fue mordido por un gato callejero es oriundo de Reino Unido. Ocho horas después, sufrió serios trastornos de salud y, cuando fue al hospital, los médicos se dieron cuenta de que tenía microorganismos de una especie de bacteria desconocida para la ciencia.

Sus manos estaban muy hinchadas, por lo que le limpiaron las heridas y le aplicaron una vacuna contra el tétanos. Luego, lo enviaron a su casa y le indicaron antibióticos, lo que no fue suficiente para recuperarse: al día siguiente, regresó para buscar atención nuevamente.

Los síntomas continuaron, con un fuerte dolor en su mano izquierda y una gran hinchazón en los dos antebrazos. De esta forma, los doctores tuvieron que extirparle quirúrgicamente el tejido dañado alrededor de sus heridas y le dieron tres antibióticos diferentes por vía intravenosa.

Otra vez fue enviado a su casa y, afortunadamente, el nuevo tratamiento funcionó. El hombre se recuperó por completo, pero debió regresar al hospital para que su caso sea analizado por científicos: los microorganismos que encontraron en su cuerpo eran totalmente desconocidos.

Luego de estudiar las muestras, notaron que los organismos eran similares al Streptococcus, un género de bacterias grampositivas que está relacionado con la meningitis, la faringitis estreptocócica, la neumonía bacteriana y la conjuntivitis.

Sin embargo, al final la bacteria pertenecía a las bacterias llamadas Globicatella. La secuenciación completa sugiere que difiere de otras cepas relacionadas, lo que indica una "especie distinta y no descrita previamente". Además, resiste a varios antibióticos, motivo por el cual puede ser difícil de erradicar del cuerpo.

"Este informe destaca el papel de los gatos como reservorios de especies bacterianas aún no descubiertas que tienen potencial patógeno humano", escribieron los autores de la investigación correspondiente. De esta forma, se desconocen un montón de cuestiones al respecto.