UNICEF reportó una fuerte baja de la pobreza en Argentina, pero alerta por el endeudamiento de la clase media

Un nuevo informe de UNICEF Argentina reveló una caída significativa en los niveles de pobreza infantil en el país, aunque con señales de alerta que preocupan. Según la 9na Encuesta Rápida sobre la situación de la infancia y la adolescencia, el 31% de los hogares con niñas, niños y adolescentes no logra cubrir sus gastos corrientes con los ingresos mensuales, frente al 48% registrado el año pasado. Esta mejora se refleja especialmente en los sectores más vulnerables, donde la recomposición de ingresos permitió aliviar parte de las dificultades económicas que enfrentaban las familias.

El estudio, que se realiza desde 2020, analizó el contexto económico, social y de bienestar de los hogares con niños y adolescentes. Los resultados muestran avances en el acceso a bienes y servicios básicos: la proporción de familias que no puede llevar a sus hijos al médico o dentista por falta de dinero cayó ocho puntos porcentuales, y los hogares que debieron restringir comidas bajaron del 52% al 30%. También se observó una mejora en la posibilidad de afrontar gastos vinculados a la crianza, como útiles, vestimenta y actividades recreativas.

A pesar de los progresos, la pobreza infantil aún afecta al 46,1% de los chicos y chicas del país, aunque esta cifra representa una reducción de 21 puntos porcentuales respecto al primer semestre de 2024. En tanto, la pobreza extrema alcanza al 10,2%, tras una caída de 17 puntos, de acuerdo con los últimos datos del INDEC.

Sin embargo, la encuesta de UNICEF advierte sobre un aumento del endeudamiento familiar, que se consolidó como una de las principales preocupaciones del último año. El porcentaje de hogares con deudas con bancos, tarjetas de crédito, prestamistas o a través de ANSES creció del 23% al 31%, y si se incluyen los préstamos obtenidos mediante billeteras virtuales o mecanismos informales, el número asciende al 45%. Cuatro de cada diez hogares debieron dejar de pagar algún servicio, un 16% presenta problemas con el pago de las tarjetas, y uno de cada diez tuvo que darse de baja de su prepaga o cambiar a sus hijos de escuela por razones económicas.

El organismo explicó que los avances en los sectores más vulnerables se deben a la desaceleración de la inflación y al impacto de las políticas de protección social, como la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Prestación Alimentar, que ayudaron a sostener los ingresos en los hogares de menores recursos. No obstante, advirtió que el desafío será mantener estos logros en un contexto de ajuste fiscal y presión económica sobre la clase media, que se ve obligada a sostener su consumo a través del crédito y el endeudamiento.

Otro dato estructural que preocupa es el incumplimiento de la cuota alimentaria, que afecta al 52% de las madres que deberían recibirla. Pese a las mejoras en otros indicadores, esta cifra se mantiene sin variaciones desde años anteriores y sigue impactando directamente en el bienestar de niños y niñas.

Más allá del plano económico, la encuesta incorporó por primera vez indicadores sobre el bienestar emocional y social de los adolescentes. Allí, UNICEF registró un aumento preocupante del bullying escolar, que pasó del 25% al 41%, afectando a cerca de un millón de chicos. Además, el informe detectó que cuatro de cada diez adolescentes apostaron dinero en línea durante el último mes, lo que plantea la necesidad de fortalecer las políticas públicas de salud mental, prevención de adicciones y convivencia escolar.

En síntesis, el informe de UNICEF muestra una mejoría económica en los hogares más pobres, impulsada por la estabilidad inflacionaria y la protección de ingresos, pero advierte que la recuperación es frágil y convive con nuevos riesgos: el endeudamiento creciente, la pérdida de bienestar en los sectores medios y el deterioro del clima escolar entre los adolescentes. El organismo pidió sostener los programas sociales y reforzar las políticas de apoyo para garantizar que estos avances se consoliden y no se reviertan en el corto plazo.