Córdoba
“Pintorazo” de los jardines maternales que piden reabrir tras cinco meses sin trabajar
Las maestras de jardines maternales de Córdoba vuelven a colgar sus pintorcitos en protesta por la prolongada inactividad del sector, ya que llevan cinco meses sin trabajar, desde la puesta en vigencia del aislamiento obligatorio.
Las representantes de los jardines maternales agrupadas en la Asociación Civil Jardines Maternales (Acijam) llevan su reclamo a la sede de la Legislatura provincial y al Centro Cívico, pidiendo la rehabilitación de sus actividades o un régimen de subsidios que les permita continuar sus emprendimientos.
“Alquilo hace 20 años en la misma zona de barrio Urca, atendiendo a una comunidad de 120 pequeños, y estoy desesperada porque me encuentro en una situación límite. Ayer lloré todo el día porque es el primer mes que no les puedo pagar el sueldo a las 13 docentes que dependen del jardín maternal”, dijo a Telefe Noticias Córdoba Ana Teicher, titular del jardín maternal Pico Picotero.
“Siempre me valí de mi trabajo, de la profesión para la que estudié y me preparé; nunca pensé verme pidiendo subsidios o una ayuda al Gobierno, pero así no tengo posibilidades de seguir mucho tiempo más”, cuenta Ana con angustia.
“Hasta el momento subsistimos organizando rifas y gracias a que algunos papás pueden pagar cuotas aunque estemos cerrados; los que pueden lo hacen por solidaridad con nosotras, pero cada vez son menos porque también deben pagar una cuidadora para que asista a sus hijos en los domicilios”, relata la docente preescolar.
“También hay padres desesperados porque hay niños que han involucionado, volviendo a usar pañales cuando ya los habían dejado, y esos retrasos o los aspectos pedagógicos de nuestra tarea no son contemplados por los gobiernos; nos tratan como un comercio más, no como una etapa del aprendizaje en la primera infancia”, sostiene Teicher.
La docente explicó a este medio que “en otras provincias se han reanudado las actividades, por ejemplo con cupos de cinco niños por cada docente; son protocolos que tienen sus dificultades o mayores costos, pero que permiten seguir trabajando; en Córdoba no encontramos ninguna contemplación”.