Una nueva generación de analfabetos, el impacto de internet y las tecnologías

¿Cuándo fue la última vez que leíste un texto de principio a fin sin interrumpir la lectura, sin distraerte o desesperarte por querer llegar al final? Si te ha pasado, entonces puede que seas uno de los tantos nuevos ”analfabetos funcionales”.

El analfabetismo funcional se define como la incapacidad de un individuo de emplear eficientemente sus habilidades de lectura, escritura y cálculo en tareas comunes o cotidianas, como en las antes mencionadas, o como al escribir un e-mail formal o comprender un artículo extenso en la prensa.

Se diferencia del analfabetismo absoluto en cuanto a que éste se caracteriza por la incapacidad total de las habilidades de lecto-escritura.

“Saben leer pero no entienden lo que leen”

Según la Unesco esta incapacidad que ya alcanza a 73 millones de personales a nivel mundial y representa un obstáculo para incorporarse a los cambios de la era actual.

Uno de los retos a los que se enfrenta cualquier sistema educativo en la actualidad es el de las nuevas tecnologías. La preferencia por lo audiovisual frente a la información impresa es, de hecho, uno de los focos de origen del analfabetismo funcional. La televisión o los contenidos multimedia de la computadora ganan frente a los densos y extensos textos escritos.

El inmenso consumo de contenidos a través del celular, así como las nuevas formas de comunicación surgidas gracias a la aparición de aplicaciones para el propio teléfono, son otra vertiente del problema cuyas implicaciones conocemos todos.

El uso de las redes sociales y la cantidad de signos y símbolos hacen que la mente se desvíe de lo que queremos leer, ya no pasamos simplemente de hoja, vamos y venimos con un click, subimos y bajamos con un scroll y la imaginación vuela.

Leer no es únicamente descifrar los signos que conforman una palabra o un párrafo, sino entender de manera amplia el sentido de aquello que se lee, su sentido literal y su sentido figurado; el mensaje que se busca transmitir; la posición ideológica desde la cual se habla y otras sutilezas presentes en un texto.

En concreto, en un informe de 2013 la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) alertaba del analfabetismo funcional que adolecen países como España o Italia, en los que los niveles de comprensión lectora o capacidad matemática se sitúan en los últimos puestos entre los países desarrollados, lejos de los primeros puestos que ocupan países como Japón o Finlandia.

Es más, en 2015 se calculó que la Unión Europea contaba con hasta 73 millones de analfabetos funcionales adultos y que hasta un 20% de los menores de 15 años no contaban con las capacidades de lectura y escritura básicas