Los trastornos de la conducta alimentaria son un grupo de enfermedades que, entre otras cuestiones, provocan que una persona tenga pensamientos y conductas no saludables, obsesivas y de alto riesgo en relación con la comida y su imagen corporal. Este tipo de trastornos existen desde tiempos remotos y afectan a millones de personas en todo el mundo, pero desde la pandemia estos trastornos han crecido de “manera exponencial”
A más de tres años de la pandemia por COVID-19, los efectos colaterales de la mayor crisis sanitaria del mundo moderno aún afectan a la población. Pero no son trastornos nuevos, existen desde que el hombre tiene conciencia de sí mismo. Todo esto, sumado a una sociedad que refuerza un ideal erróneo de lo que está bien y lo que está mal, la cuestión se complejiza aún más.
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) en algunas personas puede darse mediante una restricción drástica de la ingesta de alimentos (es el caso de la anorexia nerviosa, o puede manifestarse comiendo de forma compulsiva durante períodos cortos de tiempo, a los que llamamos trastornos por atracón.
Los TCA son síndromes multicausales, esto quiere decir que no tienen una causa única, sino que están determinados por una complejidad de factores y afectan un montón de áreas de la vida de la persona, no sólo la relación con la comida y la imagen sino también el humor, la conducta, la autoestima, las relaciones con los otros, la capacidad de concentrarse y sus proyectos.
Siempre son patologías graves, que impactan tanto en la salud física como mental, y en las que intervienen factores biológicos, psicológicos y ambientales que se combinan generando una vulnerabilidad que propicia el desarrollo y bienestar integral de la persona.
Son patología con una alta tasa de muerte, tanto por complicaciones médicas como por suicidio. Además, presentan un mayor riesgo de evolución crónica y resultados adversos en comparación con otros trastornos mentales. Afectan a personas de cualquier edad y género, aunque es mucho más prevalente en mujeres adolescentes.
Los especialistas remarcan que no se enferma de bulimia o anorexia quien quiere, sino quien puede, en cuanto a que hay condiciones de personalidad, genéticas y emocionales que predisponen para desarrollar estos problemas.
Para saber más sobre el amplio espectro de los Trastornos de la Conducta Alimentaria, escuchá en esta nueva entrega de SALUD en 3 Minutos a la Lic. Soledad Moreno Rodríguez, Coordinadora General de Fundación Centro, quien nos abre las puertas a este universo que cada día afecta a más y más personas en todo el mundo.
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