Política y economía
Casi una de cada cinco familias cordobesas necesita ayuda para poder comer
El Centro de Almaceneros alertó por el deterioro social en Córdoba: el 19% de los hogares pidió ayuda para alimentarse y el consumo cayó fuerte, dejando a muchos comercios en una situación límite.
El Centro de Almaceneros de Córdoba volvió a encender las alarmas en su informe de noviembre. Además de relevar la inflación mensual, el organismo mostró un deterioro social que se profundiza: el 19% de los hogares de la provincia debió pedir algún tipo de ayuda para garantizar su alimentación.
El titular de la entidad, Germán Romero, explicó que la pérdida del poder adquisitivo empujó a miles de familias a depender de apoyos externos. Entre quienes lograron comprar alimentos por sus propios medios, el 72% lo hizo gracias a la asistencia del Estado. Y un dato especialmente grave: en el 11% de los hogares relevados hubo personas que comieron sólo una vez al día o directamente pasaron jornadas sin ingerir alimentos.
Según Romero, seis de cada diez familias ya no logran cubrir la canasta básica alimentaria. Este escenario, dijo, no sólo desnuda la gravedad de la crisis social sino que tiene derivaciones directas sobre la economía local.
En ese sentido, advirtió que el comercio minorista atraviesa una etapa crítica por el derrumbe del consumo. La comparación interanual marca una baja del 9,2% en ventas durante noviembre, y si se observa el período enero-noviembre frente al mismo lapso del año pasado, el desplome llega al 22%. A esto se suman alquileres cada vez más elevados y costos fijos que no dejan de subir.
Aunque por ahora no se observa un cierre masivo de negocios, Romero señaló que muchas pequeñas empresas están en una situación “límite”. La contabilidad de buena parte de estos comercios muestra números rojos y un horizonte incierto, especialmente de cara a febrero del próximo año.