En medio de una crisis económica y desgaste pospandemia, la muerte de la joven Mahsa Amini en Irán reavivó una llama: las mujeres dijeron basta y salieron a las calles y redes sociales a imponerse contra la Policía de la Moral que actúa con violencia descomunal contra ellas.
La mujer desafió las reglas de la ley islámica y caminó sin el hiyab por las calles de su país. Aunque las autoridades aseguran que murió por causas naturales, la información difundida por activistas y la Oficina de Alto Comisionado de DD.HH dice otra cosa.
La decisión de Amini generó que la Policía la asesine a sangre fría, lo que marcó un antes y un después en la vida de las mujeres de este país.
Cansadas de estar oprimidas por la ley islámica salieron a rebelarse a las calles con la esperanza de ponerle fin a las reglas que oprimen a millones de mujeres y niñas.
"Tengo miedo de verlos (policía moral). Creo que es una cosa inútil. Deberían dejar que la gente elija como todos los demás países; cada persona debe elegir lo que a ella le gusta", dijo una de las protagonistas del hecho histórico que ocurre en medio oriente.
La presencia de las mujeres en las calles generó que la violencia por parte de la Policía contra ellas crezca y hasta ahora, las manifestaciones dejaron un saldo de al menos 50 muertos por la represión del régimen.
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