La ciudad de Freudenberg (Alemania) está en shock desde el fin de semana, por un caso policial estremecedor: una niña de 12 años fue encontrada muerta en una zona de bosques. Las responsables fueron otras dos niñas, que la asesinaron de 30 puñaladas.
La pequeña llamada Luise había ido a lo de una amiga el sábado y nunca regresó. Con el correr de las horas sus padres comenzaron a desesperarse: no respondía mensajes, no atendía las llamadas y nadie sabía cómo ubicarla. No tuvieron opción más que esperar en casa, pero tras 24 horas sin novedades sobre el paradero de su hija, fueron a la estación de policía a buscar ayuda.
Un gran operativo se puso en marcha de inmediato. Bomberos y perros rastreadores recorrieron la zona cercana a la frontera del estado de Renania Palatinado. Los especialistas imaginaban que se había perdido pero todo cambió rotundamente de un momento al otro. Encontraron su cuerpo sin vida en un charco de sangre y plagado de heridas por cuchilladas.
"La niña murió como resultado de numerosas heridas de cuchillo y por la pérdida de sangre", dijo el fiscal de Coblenza, Mario Mannweiler, en una rueda de prensa.
Según indicó la revista Focus, la joven recibió "más de 30 puntazos" que "no fueron muy profundos, pero aún resultaron fatales". El arma del crimen aún no apareció pero habría sido un cuchillo de cocina.
La autopsia determinó que “la nena murió a consecuencia de las numerosas heridas de arma blanca y la consiguiente gran pérdida de sangre”, indicó el fiscal Mannweiler.
La investigación indagó a dos chicas, de 12 y 13 años, el foco era conocer los últimos movimientos con vida de Luise, pero la niñas terminaron confesando el asesinato. Florian Locker, jefe de la policía de Coblenza, destacó que las dos menores "dieron informaciones sobre el caso y finalmente confesaron el crimen".
Las dos chicas y Luise se conocían, agregó el fiscal, pero no dio más detalles sobre las sospechosas, que al tener menos de 14 años son inimputables penalmente por sus acciones en Alemania.
"Creemos que este crimen fue cometido por dos niñas", dijo Mannweiler, quien aclaró que como se trata de menores de 12 y 13 años, no están sujetas a la ley penal que en Alemania solo rige para menores a partir de los 14 años. Por lo que están en manos de la oficina de menores.
Lo único que trascendió fue que las dos chicas y Luise se conocían, pero el fiscal no dio más detalles sobre las sospechosas.
Comentarios