Nicolás Brondo es ilustrador, historietista y uno de los nombres fuertes del mundo del cómic en Córdoba. Con más de cuatro décadas de vida y varias publicaciones editadas en Argentina, Brondo dio un salto significativo cuando fue convocado para trabajar en la serie de Netflix basada en El Eternauta, la icónica obra de ciencia ficción argentina.
El contacto surgió gracias a su trabajo previo en Manta, una historieta de edición cuidada que llamó la atención de la producción de la serie. A través del guionista Marto Mazzeo y con la mediación de Celeste Méndez, Brondo fue invitado a sumarse al equipo de arte y colaboró en el diseño de los trajes que los personajes utilizan para protegerse de la temible nevada que atraviesa la historia. Su trabajo se realizó bajo la dirección de la vestuarista Patricia Conta y fue parte de una experiencia que el artista describe como "increíble".
Fan declarado de El Eternauta, Brondo conserva una edición del año 1994 firmada por Francisco Solano López, uno de los creadores de la obra junto a Héctor Germán Oesterheld. "La tengo desde que era adolescente, me la regaló mi papá. Para mí vale oro", dijo sobre ese ejemplar.
A través de su testimonio, resalta la importancia histórica de la obra: no solo por su contenido distópico y político, sino también por el contexto en el que fue creada. Mencionó la desaparición de Oesterheld durante la última dictadura militar y el exilio de Solano López, así como los conflictos legales en torno a los derechos de autor. "Es la historieta más importante de nuestra historia. No sé si la mejor, pero la más relevante, sin dudas", afirmó.
Brondo señaló además el impacto internacional que tuvo la obra, especialmente en países como Italia, donde El Eternauta fue editado en múltiples formatos. Atribuye ese alcance global a la capacidad visionaria de Oesterheld: "Era un adelantado a su época".
Desde su rol como creador y editor, destacó el crecimiento del cómic nacional y la calidad con la que se están publicando nuevas obras en Argentina. Además de su propio trabajo, impulsó recientemente la editorial Historieta Cachengue y está vinculado a una nueva escuela de historietas en Córdoba llamada Diego Cortés, que funciona en Aguas de la Cañada.
"Hay muchas editoriales, autores y autoras trabajando en el país, con una calidad impresionante. Vale la pena acercarse a las comiquerías y conocer lo que se está produciendo hoy en Argentina", alentó.
Para Brondo, haber aparecido en los créditos de la serie fue un cierre perfecto para una experiencia profesional que lo conectó con una de las obras que lo formó como lector y dibujante. Hoy, su trazo forma parte del universo de El Eternauta, que vuelve a conquistar nuevas generaciones desde la pantalla.
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