Luego de diez largos años, condenaron al suboficial Javier Alejandro Vega, que fingió estar haciendo un allanamiento en un comercio y se robó un BMW.
Tras una larga investigación del fiscal Marcelo Fenoll, Vega fue sentenciado a un año y tres meses de prisión condicional, con imposición de reglas de conducta por dos años e inhabilitación para ejercer cargos públicos por dos años y seis meses.
Para evitar ser enviado a la cárcel de Bouwer, admitió que había delinquido y accedió a un juicio abreviado.
El hecho
El 15 de febrero de 2014, el agente Javier Alejandro Vega aprovechó su condición de Policía y arribó a un comercio de barrio Jardín alegando que tenía un pedido de secuestro de un BMW 247-330i.
Lo acompañaba un familiar que, años atrás, había adquirido ese vehículo y efectuado varios traspasos de titularidad.
Allí, fingieron que tenían un pedido de secuestro y se llevaron el auto importado.
Como si fuera poco, desde que ocurrió todo -hace 11 años- hasta la actualidad estuvo cobrando la totalidad de su sueldo como policía, sin prestar ningún trabajo. Según señaló, pidió jubilarse y no se lo aceptaron.
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