Esta obra de infraestructura se llevó a cabo en el sector conocido como "Quebrada de la Cancha", un área utilizada por el ejército para prácticas.
La creación de estas calles cortafuegos se realizó anticipándose a la temporada de alto riesgo de incendios, con el objetivo de proteger uno de los sectores más sensibles de la región. Esta iniciativa se enmarca en el Plan Provincial de Manejo del Fuego y contó con la colaboración del Ministerio de Seguridad, el Equipo Técnico de Acción contra Catástrofes (ETAC) y la Administración de Parques Nacionales.
El Ente Metropolitano proporcionó maquinaria pesada, incluyendo una cargadora frontal y una motoniveladora, mientras que los bomberos voluntarios llevaron a cabo trabajos manuales en áreas inaccesibles para los vehículos de gran porte. Rodrigo Fernández, presidente del Ente Metropolitano, expresó su satisfacción por la colaboración entre diferentes jurisdicciones y comentó: “Como bombero voluntario, me siento orgulloso de contribuir a la preservación ambiental de este espacio considerado el pulmón verde dentro del área metropolitana”.
Marcelo Taboada, Jefe de Operaciones del Plan Provincial del Manejo del Fuego, explicó: “Este sector, conocido por su difícil acceso y alta carga de combustible, ha sido históricamente conflictivo en cuanto a incendios forestales, generando riesgos en la zona de interfaz y en La Calera”.
Facundo Fernández, director de la Regional Centro de Conservación de Parques Nacionales, destacó la importancia de esta acción: "Gracias a la colaboración, hemos logrado importantes tareas de prevención de incendios forestales para proteger y conservar el patrimonio natural de todos los cordobeses y argentinos".
El pulmón verde metropolitano
La Reserva Natural de la Defensa La Calera juega un papel crucial en la regulación del sistema hídrico de la cuenca del Río Suquía, en una región semiárida. Sus bosques son esenciales para la conservación de la biodiversidad, albergando 344 especies nativas, 32 de ellas amenazadas, y 19 especies exóticas. Con sus 13.628 hectáreas, la reserva es considerada el pulmón verde del área metropolitana de Córdoba.
Situada en la zona de transición entre el Chaco Seco y el Espinal, la reserva abarca una parte de las Sierras Chicas, entre las ciudades de Córdoba, Villa Carlos Paz, Malagueño y La Calera. Fue creada a partir del Protocolo Adicional Nº 5, firmado el 3 de julio de 2009 entre Parques Nacionales y el Ejército Argentino, que administra el área y realiza allí el entrenamiento del personal militar.
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