Concejo Deliberante: debaten la regulación del transporte por aplicaciones

El Concejo Deliberante de Córdoba comenzó a tratar este martes un proyecto que busca poner en regla a los servicios de transporte por aplicaciones. La propuesta apunta a legalizar y controlar plataformas como Uber o Cabify, estableciendo condiciones específicas para los vehículos, choferes y empresas.

Entre los requisitos previstos, los autos deberán tener menos de diez años de antigüedad, contar con aire acondicionado, seguro, baúl adecuado y llevar una identificación visible con el logo de la app y un código QR. Deberán tener seguro, ITV al día y motor no inferior a 1.000 cm³. Además, solo podrán trabajar quienes tengan licencia profesional, antecedentes penales limpios y estén registrados en un sistema municipal y cumplir con un máximo de 12 horas de conducción por día.

También se establecería una tarifa mínima, equiparable al boleto urbano, un cupo máximo de vehículos habilitados (uno cada 375 habitantes) y un sistema de evaluación para los conductores y un canal oficial de reclamos, que dependerá de la Subsecretaría de Movilidad. Las plataformas deberán tributar impuestos como cualquier otra empresa.

El concejal Marcos Vásquez, impulsor del proyecto, explicó que la iniciativa busca brindar seguridad a los vecinos y ordenar un servicio que ya existe, pero sin regulación. Aclaró que taxis y remises podrán sumarse a estas apps sin ser contabilizados dentro del cupo, y que los conductores podrán comenzar a operar una vez iniciado el trámite de habilitación.

Qué dicen los taxistas

La iniciativa generó posturas divididas entre los taxistas. Mientras algunos aceptan la regulación y reconocen que realizan viajes mediante aplicaciones, el Sindicato de Peones de Taxis manifestó su rechazo y calificó la norma como “la ruina” para el transporte legal. Además, expresaron dudas sobre la inscripción de los conductores en el nuevo sistema, advirtiendo que muchos podrían evitar el registro.

El debate sobre la legalización y regulación de estas plataformas continúa abierto, con miradas contrapuestas sobre su impacto en el sector tradicional del transporte público.