Tiene todos los condimentos de una guerra. Bandos enfrentados, territorios en disputa, tiros, sangre y muerte, mucha muerte. El gran botín es el negocio del narcotráfico. Y el “teatro de operaciones”, el triángulo que conforman los barrios Sarmiento, 9 de Julio y 18 de septiembre, en el partido de San Martín.
La última “batalla” ocurrió el viernes pasado, cuando Lautaro Maturano, un “soldadito” de una banda de narcotraficantes de “El 18”, fue secuestrado, torturado y asesinado por dos jóvenes que, luego de bajarlo de un auto maniatado y con la cara cubierta, lo acribillaron a balazos.
Según datos del ministerio del Seguridad de San Martín, solo en lo que va del año se hicieron 2407 operativos por drogas, fueron detenidas 2388 personas y se secuestraron 21 kilos de cocaína y 35 de marihuana.
Además, ocurrieron siete homicidios, pero hay quienes hablan de muchas más. “Lo que pasa es que hay muchos casos que ni siquiera se denuncian. Desde que pasó lo de la cocaína adulterada la guerra es sin cuartel. Por lo menos tengo computados 23 muertos”, asegura Marcelo Ballester, presidente de la ONG #1 La gente, siempre.
Y detrás de todo siempre aparecen los mismos fantasmas: Mameluco Villalba; El Rengo Pacheco y Alicho Alegre, históricos capos narcos de San Martín. Los “generales” que conducen esta guerra. Lo insólito es que los tres están presos.
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