Una pastelería española se promociona con un pesebre donde el niño Jesús, la Virgen María y San José están hechos de bizcochuelos con la forma de las partes íntimas.
La exposición del pesebre causó un escándalo que trascendió las fronteras de Sevilla, ciudad española donde la pastelería erótica ofrece los polémicos bizcochuelos que han ofendido a muchos creyentes de la religión católica.
El hecho de que el niño Jesús, la Virgen María y San José están caracterizados en forma de penes y vaginas hizo que la pastelería, que se llama "La Verguería", recibiera denuncias desde la Fundación Española de Abogados Cristianos y Vox.
El pesebre recibió adjetivos como "ofensivo y vejatorio" por parte de Polonia Castellanos, la titular de Abogados Cristianos, quien además condenó el hecho de que la caracterización "está a la vista de todos, incluso de los niños".
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