Esta semana, Floppy Tesouro confirmó su separación de Rodrigo Fernández Prieto, con quien se había casado en diciembre de 2017 tras dos años de noviazgo y una hija en común: Moorea. A la hora de hablar de su ruptura, la panelista aseguró que por momentos se sentía muy sola. Finalmente, confesó cuál fue el momento que marcó el quiebre de su relación con el empresario.
Fue entonces le reconoció a Andy Kusnetzoff que la ausencia de su marido en el bautismo de Moorea marcó un antes y un después en la pareja: "El bautismo fue un temón, una bisagra en mi relación. Traté de surfearla, salir adelante, obviamente no me iba a separar porque no fue al bautismo de la nena".
"Él no es creyente y sentía que no quería formar parte de ese momento. Me angustié mucho, me dolió por mí y por la nena, sentí que era un momento que nos tenía que acompañar a las dos. Me sentí bastante sola, si bien estaba toda mi familia y la de él. No era un tema de ruptura pero fue la gran bisagra en la relación. Después fueron pasando otras cositas", cerró.
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