Entramos a los camarines de la reconocida payasa alhelí junto a Valentino su fan número uno, tiene 14 años, vive a la vuelta del teatro y va a todas las funciones. Cuando Jorgelina Castagno se pone la nariz Valentino se siente feliz. La cultura y el arte son la herramienta más poderosa de inclusión, participación y transmisión de sentidos.
Valentino sigue a la payasa desde sus inicios cuando la payasa cordobesa Alhelí realizaba sus espectáculos en la plaza de su barrio. Su mamá nos cuenta que la emoción y conexión con el show le permite reír, relajarse y dejar atrás momentos estresantes.
El teatro nos permite mejorar el lenguaje, la comprensión y la expresión en niños. Valentino disfruta cada momento y se entrega a lo que sucede en el escenario.
Compartimos la importancia que tiene la cultura y el teatro para el desarrollo en los más chicos y especialmente aquellos con discapacidades que encuentran en esas actividades una contribución a las estimulaciones neurológicas y motrices como complementos de sus tratamientos terapéuticos.
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