Un violento episodio de inseguridad sacudió este sábado al mediodía a un kiosco ubicado sobre Avenida Donato Álvarez al 9020, en la ciudad de Córdoba.
Un delincuente armado ingresó al local, redujo al empleado y al escapar disparó dentro del comercio, generando pánico.
Según quedó registrado en las cámaras de seguridad, el ladrón entró al negocio y, tras preguntar si la persona presente era el dueño o un empleado, exigió la entrega del dinero. El trabajador le dio parte de la recaudación, pero el asaltante no se conformó, pasó al sector del mostrador y lo obligó a ingresar al baño.
En ese momento, el empleado activó el botón de pánico. El delincuente tomó lo que pudo de la caja registradora y huyó. Sin embargo, antes de escapar efectuó un disparo dentro del kiosco. La bala impactó contra la pared, de milagro sin herir a nadie.
El dueño del comercio expresó su indignación y desesperación por la situación:
“El ladrón entró como si nada. No es la primera vez que nos roban. Esto es una zona prácticamente liberada”, aseguró.
“La policía nos dijo que no patrullan porque hay pocos patrulleros. La inseguridad está a cualquier hora del día”.
“Hay que estar detrás de una reja para poder vender. No sé hasta cuándo podremos seguir”.
Además, el comerciante señaló que la crisis de inseguridad se combina con la caída de las ventas: “La gente evita venir por miedo. A la baja del consumo se suma el temor de los vecinos”.
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