Uno de los repartidores expresó la difícil realidad que atraviesan: "Salir a trabajar es una lotería, es salir y no saber si volvemos a casa. Lamentablemente nosotros estamos solos, nos tenemos que cuidar entre nosotros".
Los trabajadores relatan que enfrentan delitos como pedidos falsos y personas que se hacen pasar por clientes, llevándolos a barrios peligrosos con fines delictivos. Según su testimonio, la inseguridad ya no distingue horarios: "Antes a la noche no se podía trabajar porque era el horario más inseguro, pero ahora es todo el día."
La iniciativa del mapa no solo busca advertir a otros compañeros, sino también visibilizar una problemática que afecta a todo Córdoba, incluso en zonas céntricas.
Con esta herramienta, los repartidores intentan cuidarse entre ellos mientras esperan que las autoridades tomen medidas para garantizar su seguridad.
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