Luego de la denuncia y clausura en el centro de distribución por la presencia de 27 trabajadores encerrados en una habitación, en condiciones vulnerables, trabajadores negaron destratos por parte de sus empleadores.
“No hay gente encerrada. Trabajamos de 6.30 a 15.30, la gente es de la zona. Esto es pura difamación”, expresó uno de los trabajadores.
“Los del sindicato nos metieron en esa habitación oscura. Pasó de un relevamiento a una denuncia falsa que no tiene sentido. Nosotros hoy nos estamos quedando sin trabajo. Acá viven 20 familias, nos quedamos sin trabajo”, sostuvo.
“Acá no se le obstruyó el paso a nadie, en todo momento estuvimos a disposición, todas las preguntas fueron respondidas. Era como un choque: les respondíamos y las respuestas no les gustaban”, indicó.
“Nosotros somos familia, somos gente del barrio. Acá fueron los únicos que me dieron oportunidad de trabajar, tengo un hijo discapacitado”, señaló.
Por último, la empleada agregó: “No entiendo qué pasó. Las cosas que se dijeron son lo más lejano de la realidad, hasta el desayuno nos compran”.
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