En agosto de este año, la Justicia de Córdoba confirmó que los restos humanos encontrados dentro de un placard en un departamento céntrico de Córdoba, (Buenos Aires al 300) correspondían a Milagros Basto, la joven de 22 años que estaba desaparecida desde el 20 de agosto del 2024.
El hallazgo tuvo lugar en un departamento perteneciente al expolicía Horacio Grasso, condenado en 2009 a 27 años de prisión por el crimen de un niño de cinco años. Uno de los albañiles que descubrió el cuerpo relató que había sido contratado por Javier Grasso, hermano del expolicía. Según su testimonio, al ingresar al lugar percibió un fuerte olor y, al revisar un placard utilizado como depósito, encontró un bulto cubierto por una manta roja y blanca atada con un cable, tapado además con cal. El testigo aseguró que al examinar el interior, se topó con una cabeza humana.
Cuando corrí la manta, vi la cabeza y empecé a gritar, recordó el trabajador.
El hombre también aseguró que Javier Grasso intentó sobornarlo con 100 mil pesos para que no diera aviso a la Policía. “Me ofreció plata para que me callara, pero decidimos hacer la denuncia”, señaló.
Cabe destacar que, al momento del hallazgo, Horacio Grasso ya no estaba en el lugar, había sido trasladado días antes a la cárcel de Bouwer por incumplir reiteradamente las condiciones de su prisión domiciliaria. Por su parte, su hermano sigue prófugo de la Justicia.
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