El incendio forestal en Guasapampa, en el Valle de Traslasierra, fue contenido por bomberos que trabajaron intensamente durante horas. Según informó Roberto Schreiner, vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, el fuego fue apagado “a mano”, en una zona de difícil acceso.
Las condiciones climáticas mejoraron y la lluvia trajo alivio a los equipos que combatían las llamas. Schreiner explicó que la topografía del lugar complicó las tareas, ya que los vehículos no podían llegar al área afectada.
Aunque el incendio fue controlado, aún permanece personal trabajando en el terreno para evitar reinicios. Los bomberos continúan en tareas de enfriamiento y control en los perímetros calientes. La prioridad es mantener la prevención para impedir que el fuego vuelva a propagarse.
Las autoridades estiman que unas 1.500 hectáreas fueron afectadas por el fuego. A pesar de la magnitud del incendio, no hubo riesgo para viviendas cercanas, indicaron desde la Secretaría.
El operativo desplegado incluyó brigadas de distintos cuarteles, apoyo de Defensa Civil y recursos provinciales. La combinación de la labor humana y la lluvia permitió contener finalmente el foco en la zona serrana de Guasapampa.
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