Durante los operativos se descubrieron instalaciones que llevaban a cabo el faenamiento y desposte de animales sin las habilitaciones y condiciones higiénico-sanitarias adecuadas para garantizar la salubridad de los alimentos cárnicos.
Como resultado de estas acciones, se incautaron 1.500 kilogramos de carne y se clausuraron las instalaciones mediante fajas de clausura y precintos en los accesos, ordenando el cese inmediato de la actividad.
La carne confiscada fue trasladada a un frigorífico autorizado para su destrucción en un digestor.
Estas medidas se llevaron a cabo en el marco de la Ley N° 10.326 "Código de convivencia de la Provincia" y la Ley N° 6.974 "Faenamiento, comercialización e industrialización de la carne".
Es importante destacar que cualquier producto o subproducto de origen cárnico debe provenir exclusivamente de frigoríficos mataderos y chacinadores debidamente habilitados para tal fin.
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