Mientras avanza la obra municipal para bulevarizar la avenida Maipú al 300, comerciantes de la cuadra viven con temor. Una tela de obra instalada sobre más de 50 metros impide ver desde el exterior y genera un punto ciego que, aseguran, es aprovechado por quienes delinquen. En los últimos días se registraron robos, destrozos e ingresos violentos a locales.
“Esto es una zona roja muy peligrosa”, resume Omar, uno de los comerciantes. “La inseguridad aumentó debido a la lona que han puesto, no nos ven. Un policía acá siempre va a venir muy bien, pero tiene que estar las 24 horas. Si está un ratito, no sirve”, advierte.
La falta de circulación y la nula visibilidad también fueron señaladas por Nery, que remarcó el riesgo constante que implica la situación. “Me han robado las luces. Estamos en constante peligro de que nos abran la reja. Es un laberinto totalmente oscuro”, señaló.
El hecho más grave lo vivió Kelly: “Nos robaron todo: freidora, panchera, una olla eléctrica, toda la mercadería. No dejaron nada y rompieron todo. Se tomaron el tiempo de sacar todos los focos”, relató. El local quedó completamente saqueado.
En este contexto, los comerciantes reclaman presencia policial permanente hasta que finalice la obra. Aseguran que la situación es insostenible y temen que los robos continúen.
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