Portada  |  03 noviembre 2025

¿Sabés cómo aprovechar cada gota de agua cuando hace calor?

El clima cálido aumenta la demanda de agua y, con las altas temperaturas, regar correctamente es clave. No se trata solo de mantener verdes las plantas, sino de utilizar el recurso de manera responsable, evitando desperdicios y contribuyendo a la sostenibilidad ambiental. Cada gota cuenta y cada hábito hace la diferencia.

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¿Hay un momento ideal para regar?

El mejor horario es a primera hora de la mañana, cuando la planta puede absorber el agua durante todo el día. Regar a mediodía provoca que el agua se evapore rápidamente y que el sol queme las hojas. Otra opción es al atardecer, cuidando de no excederse para evitar humedad excesiva y la aparición de hongos.

Otros consejos para un riego eficiente

1. Menos riegos: no es necesario regar todos los días. Para flores o huertas, 2-3 riegos semanales permiten que las raíces desarrollen reservas y resistan mejor el calor.

2. Dirigí el agua a las raíces: evita mojar hojas y flores; el agua debe llegar directamente a las raíces. Esto reduce enfermedades en las plantas y maximiza la absorción del agua. El riego manual con regadera al pie de la planta es ideal.

3. Evitá el encharcamiento: el exceso de agua puede dañar raíces y desperdiciar recursos. Observa cómo absorbe el suelo antes de volver a regar y ajusta la cantidad según el tipo de planta.

4. Mantené la humedad constante: un suelo equilibrado en humedad ahorra agua y protege las plantas del estrés hídrico. Evita que el suelo se seque por completo, pero también que quede saturado.

5. Reutilizá el agua: recolecta agua de lluvia, reutilizá agua de lavados domésticos y, cuando sea posible, utilizá regadera de mano antes que manguera.

Beneficios del riego consciente

● Plantas y césped más sanos: después de implementar estos tips el resultado es un jardín más verde, fuerte y duradero durante toda la temporada de calor.

● Uso responsable del agua: un riego eficiente significa usar solo la cantidad necesaria, evitando pérdidas por evaporación o escurrimiento.

● Contribución directa a la sostenibilidad y cuidado ambiental: adoptar buenas prácticas de riego es un acto de responsabilidad ambiental, que enseña a cuidar los recursos naturales mientras se disfruta de un jardín saludable.

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