Cada año en Argentina nacen aproximadamente 1.000 niños con Fisura Avéolo Palatinas. Esta malformación congénita que actualmente cuenta con diversas formas de tratamientos para mejorar habla, alimentación, respiración y oído.
La denominación "labio leporino" proviene del latín "lepore", denominación de liebre, animal que posee el labio superior con la hendidura en el medio, con el avance del uso de la lengua y la creciente importancia de utilizar la denominación médica de las enfermedades y en especial de las discapacidades en la actualidad se lo denomina como FLAP (Fisura Avéolo Palatinas).
Naturalizar la conversación sobre esta malformación y otras discapacidades, compartir el camino de cirugías, tratamientos, estilo de vida contribuye a romper estereotipos y evitar discriminación o bullying. Este es el mensaje de los papás de Brisa y Ámbar quienes junto a las 4 hermanas restantes de las gemelas encontraron una manera de superarse y sentirse bien, cómodas, amadas y respetadas.
El acompañamiento institucional de la escuela y la familia son fundamentales para fortalecer los vínculos y dar luz en los ámbitos de las discapacidades donde no se tiene información.
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